Crianza positiva: Cómo ser amable y firme al mismo tiempo para educar con amor y respeto
En este artículo encontrarás cómo llegar al equilibrio entre la amabilidad y la firmeza, dos componentes clave para educar a nuestros hijos con amor y claridad. La Disciplina Positiva, es la base de la filosofía en el Gimnasio Campestre Oxford y ayuda a formar niños emocionalmente sanos, responsables y seguros de sí mismos.
La Disciplina Positiva es un enfoque educativo que promueve el respeto mutuo, la empatía y la comunicación asertiva. Busca enseñar habilidades sociales y emocionales sin castigos sino con consecuencias lógicas, reforzando el desarrollo de la autodisciplina y el sentido de pertenencia. A través de este método, los adultos guían con afecto y límites claros, sin caer en el autoritarismo ni en la permisividad.
El extremo de la permisividad ocurre cuando los padres evitan poner límites para evitar que sus hijos sufran. Esto puede generar un ambiente donde los niños no aprenden a tomar responsabilidad por sus actos y en un futuro les costará poner límites a los demás cuando no quieren algo o no están de acuerdo. Por otro lado, el extremo autoritario ocurre cuando los padres imponen reglas estrictas sin considerar las necesidades emocionales del niño, lo que puede generar rebeldía o inseguridad en los hijos.
El equilibrio es fundamental: debemos ser firmes cuando sea necesario, pero siempre de manera respetuosa, validando las emociones de nuestros hijos. Esto les permite entender que los límites no son un castigo, sino una forma de protegerlos, ayudarles a crecer y que los límites son buenos para mantenernos en bienestar.
Consejos para criar con amabilidad y firmeza
- Validar emociones: “Entiendo que quieras seguir jugando, pero es hora de cenar.”
- Ofrecer opciones: “Es hora de dormir. ¿Quieres que apague la luz o lo haces tú?”
- Redirigir situaciones: “Sé que no quieres lavarte los dientes, pero podemos hacer una carrera hasta el baño.”
- Establecer acuerdos previos: “¿Recuerdas lo que acordamos sobre recoger los juguetes antes de salir?”
- Decir lo que vas a hacer: “El tiempo de la tablet terminó. Puedes apagarla tú o lo haré yo.”
En el Colegio GCO, creemos que educar también es acompañar emocionalmente. Por eso, nuestra filosofía está basada en la Disciplina Positiva y el botiquín de primeros auxilios para la vida, donde los errores se abordan con respeto y los límites se establecen desde la empatía, donde generamos espacios de junta de clase para que aprendan a enfocarse en soluciones, aprendan sobre los aprecios y poner límites con respeto.
Enseñamos a nuestros estudiantes a reconocer sus acciones, buscar soluciones y desarrollar habilidades para la vida con la guía de adultos presentes, amables y firmes.